Partió mi amado maestro Claudio Naranjo… Hace quince años me anoté en un curso de teatro para ver si le encontraba sentido a algo de mi vida de ese entonces, fue en el Camarin de las musas y el taller lo dictaba Miguel Cavia. El nos hablaba de un tal Naranjo y nos hacía componer personajes inspirados en el Eneagrama, hablábamos de Gestalt y de su programa de trabajo espiritual. Diré que aprendí a ser actor leyendo sobre todo a estos maestros, utilizando sus procedimientos de trabajo. Y luego buscando a sus discípulos directos para encontrar su voz. El ha inspirado esos días hasta hoy: anoche me fui a dormir escuchándolo hablar de chamanismo. Sus palabras hidratan cualquier cosa que yo le diga a algún alumne mío, a algún actor/tríz que dirija. Yo no podré decirlo mejor que el, pero me esforzaré todos los días.
Gracias Claudio. Tu amor y tu presencia desde hoy eternas
Gracias infinitas, amado maestro.